Compaginar el trabajo con el estudio ha sido considerado crucial para asegurar que los jóvenes desarrollen las habilidades que se requieren en el mercado laboral de forma rápida y fácil.
La OCDE publica Working and Learning: a diversity of patterns, un estudio basado en los datos de PIAAC 2012 (Programa para la Evaluación Internacional de las Competencias de Adultos) que muestra una imagen del trabajo y el estudio en 23 paises.
Clasifica a los estudiantes que trabajan por el contexto en el que lo hacen (contratos de aprendizaje, acuerdos privados, etc.) y evalúa la relación entre el campo de estudio y el trabajo que desempeñan. También analiza cómo las habilidades de los estudiantes se usan en el lugar de trabajo comparadas con las de otros empleados e identifica los factores sociodemográficos y las instituciones del mercado laboral que aumentan la probabilidad de trabajo y estudio.
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